“Esa es la idea, presentarles a través de Sisi y Lala un puente para que empiecen a decir: “oye, esto es esto” no simplemente ir a sentarse a escuchar una orquesta y preguntar: “¿a qué hora acaba?”, sino ver todo lo que hay detrás”. (Mateo Chiarella)

 

¿Qué sucedería si quedamos atrapados en alguna partitura? Esta interrogante podría resultar inimaginable; sin embargo para Mateo Chiarella, músico y docente, ello sería posible si decidimos aventurarnos por las riendas de la imaginación. En “Sisi y su primer concierto. Las aventuras musicales de Sisi y Lala”, obra que dirige se plantean retos para estimular la imaginación y el gusto musical de los niños y de los adultos también.

Minutos antes de presentar “Sisi y su primer concierto…”por segunda vez en el Gran Teatro Nacional, Chiarella relata al Club de Jóvenes Críticos  detalles de esta lúdica y musical puesta en escena, y reflexiona sobre los desafíos que enfrentan las artes escénicas en el Perú.

 ¿Qué significa el teatro para usted?

Mateo Chiarella: El teatro es un medio de expresión maravilloso que, básicamente, me da la posibilidad de poder tener un vínculo con mi sociedad que está representada en un público; pero un vínculo artístico, que no necesariamente es discursivo, sino que tiene que ver con mecanismos sensibles como es la emoción, la música, el trabajo plástico, visual y a través de esos medios poder llegar al corazón y a la mente de la gente.

¿Cuál es la principal misión del teatro?

Mateo Chiarella: Creo que el teatro tiene, como todo arte, la complejidad para tener muchas misiones. Particularmente, creo que todo arte, no solamente el teatro, te ayuda a sensibilizarte y ampliar formativamente una serie de elementos de la personalidad que definitivamente van a aportar a tu sociedad; por ejemplo el teatro te ayuda a ser tolerante, a entenderte más, a tener un poco más de capacidad de sensibilidad frente al sufrimiento de los otros, frente a las ideas de los otros. Te ayuda a disciplinarte, a imaginar, a desarrollar tu creatividad. Todas esas son herramientas y posibilidades que te da el teatro como público.

Desde su percepción ¿Cuánto apoyo está promoviendo el Estado a la artes escénicas?

Mateo Chiarella: Definitivamente tengo que decir que hemos avanzado. Existe un Ministerio de Cultura pero todavía estamos muy por debajo de las políticas culturales que hay en el mundo entero. Debemos ser uno de los más atrasados. Por ejemplo, en el teatro se están empezando a hacer algunos estímulos para desarrollar ideas que puedan beneficiar de manera perdurable; y es que hay que pensar bien cuáles son las políticas culturales que promueven la música, el teatro y en general todo los tipos de artes.

¿Qué expectativas tiene de la función “Sisi y su primer concierto”?

Mateo Chiarella: Muchas. Este es un esfuerzo grande que hace el Gran Teatro Nacional con Mauricio Salas a la cabeza para lograr que los chicos empiecen a vincularse con la música de una manera amable. Yo siempre digo que para que quieras que tu hijo llegue a leer, por ejemplo, Ulises de Joyce, en algún momento tiene que pasar por un puente amable de lectura que implique quizás que en sus primeros libros haya dibujitos. Entonces, de nada sirve que leamos todo El Quijote y no lo comprendamos; pero si quizás empiezas a leer un dibujo y empiezas a leer con pocas líneas después vamos a querer más y más y más, y entonces vamos a llegar a buscar más complejidad. Esa es la idea, presentarles a través de Sisi y Lala un puente para que empiecen a decir: “oye, esto es esto” no simplemente ir a sentarse a escuchar una orquesta y preguntar: “¿a qué hora acaba?”, si no ver todo lo que hay detrás. Decidimos ponerle piezas alegres, vivas y amables para que digan: “¡qué bonito es esto!”. Una de las cosas más bonitas que pasó ayer fue que cuando se estaba tocando la última pieza había niños en el público que saltaban tratando de seguir la orquesta, eso era lindo. Eso es lo gratificante de hacer este tipo proyectos.

¿Cómo fue el proceso de creación de esta función debido a que toda la puesta en escena nos enseña acerca de la música? 

Mateo Chiarella: Hice el guión después de conversaciones con Mauricio Salas y con Melissa Giorgio – que son los que están llevando a cabo toda la programación – y se lo pasé a ellos e hicieron los comentarios y de ahí paramos en lectura con las chicas y pusieron su aporte en toda la creación del personaje, sacadas del guión por supuesto, pero ya tiene que ver con la creatividad de ellas y con qué tanta empatía logran conectar con el público desde Euterpe hasta Lala. Ha sido primero un proceso rápido. Saber de música me ha permitido tener el conocimiento para poder aplicarlo; sin embargo, nada estaba dicho hasta ayer (el día de la función) porque tú puedes pensar es una clase de música básicamente y que pones tu pentagrama, etc., pero los chicos miran eso y dicen “¡que aburrido!”. Aunque tenga recursos dramatúrgicos no sabía que tanto iban a reaccionar los chicos. Pero hasta ahora muy bien, fue muy lindo ayer y espero que siga siendo así.

El año pasado, la propuesta de Mi Primer Concierto estaba dedicada a niños y jóvenes. Según el ensayo que observamos ayer, es una obra más enfocada a los niños.

Mateo Chiarella: En verdad, la función está enfocada básicamente a niños entre siete, ocho y nueve años -Sisi tiene ocho años-, debido a que se necesita una edad mínima para seguir la historia. Cuando hay niños de dos y tres años, la compresión resulta más difícil, pues ellos están en una etapa de estímulos en la que no existe el proceso cognitivo de hilar o vincular intelectualmente las cosas; así que son los niños de seis, siete y ocho los que más pueden disfrutar de esta función.

Usted es músico y a la vez docente, ¿eso ha llegado a influir en la realización de Sisi y su primer concierto?

Mateo Chiarella: Bueno, no solamente soy músico y docente; sino que además mi mamá es educadora, y yo toda mi vida he aprendido con un mecanismo pedagógico importante en mi casa. Todos pensamos que a los niños debemos hablarles como si no tuvieran inteligencia, pero a veces me sorprende su capacidad, ya que, pueden llegar a decir palabras que, a veces, nosotros no podemos decir; o manejar rápidamente la computadora. Y si les interesa algo a los chicos se van a entretener hasta con una fila de mesa. Por ejemplo, a veces los niños que juegan con un carrito en la mesa se entretienen; y eso es porque los chicos tienen que hacer es algo que les atrape y no algo que les estimule. Si ese “algo” lo atrapa se pueden concentrar con pausas y con silencios, entonces, esa idea de la educación de no tratar a los chicos como gente que no tiene inteligencia es algo que tratamos de eliminar. Por eso es que ahora nos hemos arriesgado a hacer esto porque creemos que los chicos puede llegar a seguirnos.

¿Tiene alguna intención haber incluido a una mascota en la obra?

Mateo Chiarella: Las mascotas son un bonito puente con los chicos, además que son los primeros amigos que tienen los niños. Si cuando nacen les ponemos un chanchito o un conejito, en su cama, ellos se van a relacionar con los animales, pues tienen el vínculo con los animales como ningún otro.

En su opinión, ¿cuál es la importancia de que el público tenga una conexión y acercamiento a la música?

Mateo Chiarella: Ahora estamos hablando de la música, pero creo que el arte y, en general, la cultura en los países no se entiende. Existe las malas políticas culturales porque no se logra entender cuál es su beneficio. Y es por esta razón que cuando hay un recorte en el presupuesto nacional el primer afectado es la cultura debido a que esta no se come, no nos cura, no tiene nada que ver con el transporte. Pero si aquellas personas tuviesen cultura entenderían que esta nos hace desarrollar como país. Nos hace ser mejores seres humanos, más inteligentes. Si el político tendría cultura lograría ver las cosas de manera diferente porque tener bagaje cultural nos ayuda a entender el mundo con mayor profundidad. Si tuviéramos más cultura no nos pasaríamos la luz roja ni faltaríamos el respeto a las personas, ni habrían feminicidios.

Al final de la obra, Sisi logra comprender la música y sentirla profundamente, con el corazón ¿Se podría decir que esto es lo que desea otorgar la función al público, la posibilidad de sentir y disfrutar el arte?

Mateo Chiarella: Eso es el ideal. Si se logra ello es porque ha hecho efecto la obra. Como les comenté, basta con que alguien quiera regresar a escuchar un concierto.